La reforma de la educación, promovida por José Pedro Varela, dio un gran impulso a la modernización del Uruguay. A través de ese proceso, las escuelas sirvieron para difundir valores y conocimientos que eran necesarios para que el país pudiera ingresar plenamente en el mundo moderno. La propuesta de Varela se basó en tres principios: obligatoriedad, gratuidad y laicidad. El proyecto se concretó en el gobierno de Lorenzo Latorre pero solo se aseguraron los dos primeros principios.