Hace 400 años, el territorio que hoy conocemos como Estados Unidos era una tierra desconocida para los europeos. Estaba habitado por pueblos indígenas que trataron de resistir la conquista. Los primeros europeos que llegaron allí en nombre del rey de Inglaterra poblaron una región cercana al océano Atlántico y luego extendieron sus dominios hacia el oeste. Un grupo de esos hombres pensó en crear un país independiente, que sería el primer Estado soberano de América.