Pedro I de Brasil nació en Portugal en 1798. Fue el primer emperador de Brasil después de declararse la independencia de ese país. Encabezó el Partido Nacionalista brasileño, era partidario del liberalismo y apoyó el constitucionalismo portugués. Cuando su hermano usurpó el trono portugués a su hija, viajó a Portugal y logró recuperarlo. Para eso dejó el trono de Brasil en manos de su hijo, cuando este tenía siete años. Pedro murió a los 35 años, en el palacio que lo vio nacer.